lunes, 25 de julio de 2011

La recta final

A falta de 5 días, en pocos minutos 4, miro atrás y estoy contento de mi evolución en los últimos 3 meses cuando fuí a correr la Cursa del Alba, sin apenas preparación y siendo mi primera carrera de montaña.
La verdad es que me encuentro fuerte, se que he entrenado y tengo la conciencia tranquila de que he entrenado lo suficiente y bien. Quizá pocos entrenameintos en altura, pero las posibilidades de Barcelona no son muchas respecto a esto, así que espero que mis fines de semana en Benasque , Bielsa y Núria me hayan dado ese puntito que quizá me hubiera faltado.
Está vez estoy convencido que llego con entreno suficiente: más de 40 horas de entreno corriendo, lo que suponen unos 500 Kilometros. Más de 12.000 metros de desnivel positivo acumulado. 3 Trekings en altura de más de 12 horas. 10 horas de entrenamiento en btt. Y a todo esto, si le sumo que he trabajado una media de 11 horas al dia durante los 6 últimos meses, pienso que no sé de donde he sacado fuerzas para aguenatar.
La verdad es que estoy muy orgulloso de donde he llegado y creo que independientemente de cual sea el resultado del sábado, lo importante es lo que he vivido y con quién lo he vivido para llegar hasta aquí.
Ha sido incrible el camino: El Perdiguero, El Monte Perdido, Hospitalet-Monserrat, Núria, Collserola, Barcelona, Benasque, Bielsa, Ribes.... y con quien: Jona, Marc, Mónica,  Manu, Miren, Luisito, Josemi, Aleix, Salva, Miriam, Dani (perdoname por perderme tu cumpleaños), Esther, Davide, Marta, Jose, Raquel, Alex, Aitor i Toni.
Hace un año y medio cumpli el sueño de correr una maratón. Este año repito, pero esta vez rodeado del mejor entorno, la motaña.
Cuando hace 9 meses decidi parar entrenamientos, por el dolor incesante de mi rodilla, suponía dejar mis objetivos de este año: Sevilla y Berlín, para más adelante. Tras 6 meses de parón, daba por perdidas todas mis ilusiones de preparar algo grande para esta temporada. Volver a correr (entrenar) se hacía muy cuesta arriba, pero cuando decidi probar en otro terreno y la cosa funciono, pense que hacer lo que más me gusta en el terreno que más me gusta supone disfrutar el doble de lo que más me gusta. Así que aquí me teneis por fín, de nuevo preparado para algo grande.
Quizá lo mejor de todo esto ha sido aprender que a veces uno tiene que saber ser más paciente, que la constancia y el esfuerzo te llevan a la meta, que los amigos tienen la solución a tu situación y que no hay que cerrar puertas...hay un mundo increible por disfrutar y vivir delante de nuestras narices, aunque nos lo tape el edificio de delante.
Sea como sea y pase lo que pase, quiero que sepais una cosa...preparando mi carrera del sábado he vuelto a ser muy feliz y el sábado cuando cruce la llegada volveré a dar gracias por cumplir de nuevo un sueño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario